Existen mil y un negocios infravalorados en el mundo. Digo infravalorados porque, las cosas como son, cuando pensamos en un trabajo, siempre nos vienen los mismos a la cabeza: médico, y a ser posible cirujano, puesto que son ellos los que se juegan el empleo salvando la vida de la gente; abogados, ya que de todos es sabido, que la gente incumple la ley y, que estos sufridos maestros del espectáculo, son los únicos que nos pueden sacar del atolladero si algún día hacemos una estupidez; profesores, aunque depende mucho del tipo de profesor, solo que en general tienen nuestro visto bueno porque transmiten conocimientos y son el salvoconducto que nos garantiza tener la Educación Secundaria Obligatoria, el Bachillerato de letras o de ciencias y la licenciatura o grado que hayamos escogido hacer. Es nuestro futuro, al fin y al cabo, ¿no?
Pero ahora yo pregunto: ¿y los basureros?, ¿y los limpiadores de orinales?, ¿y los señores que transportan productos lácteos a los supermercados a las cinco de la madrugada?, ¿y los que, solo una hora antes, limpian las calles? Porque sí, en la mayoría de ciudades las calles no se limpian solas: alguien lo hace, y, que yo sepa, todavía no hemos avanzado tanto en robótica e inteligencia artificia. ¿Y, ah, la compraventa de palets? Los palets son una cosa que, a simple vista, nos parece rutinaria y técnica; y por eso muchos cometen el error de creer que también es soso, soez y demás palabras con o sin ese cuyo significado semántico es el mismo: 'aburrido'.
Pues no, porque, gracias a la venta de palets, trabajos igual de infravalorados pero también igual de importantes como los otros que hemos nombrado, como el reciclaje, pueden ser posibles. La verdad es que me encantaría tomarme mi tiempo para explicar por qué, pero no creo que sea necesario teniendo la posibilidad de proporcionarles más información a través de páginas web tan acertadas y bien elaboradas como http://reciclajesraso.com. De verdad, investiguen un poco y lean la información que allí aparece; aprenderán un par de cosas y les sorprenderá descubrir también otras tantas.
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